sábado, 25 de octubre de 2008

El guardián entre el centeno



Ya terminé este fantástico libro, y pensé en escribir una buena apología de estas que o lo lees o te tiras al primer coche que encuentres, pero entonces me di cuenta, que que mejor manera de enganchar a alguien a un libro, que, que lo haga el propio autor de esta magnífica obra. Asi que a continuación os voy a añadir unas cuantas frases elegidas por mí mismo de entre las páginas de este tesoro literario (se nota que me gusta verdad):



Me miró y me sonrió un poco. Tenía una sonrisa fantástica. De verdad. La mayoría de la gente, o no sonríe, o tiene una sonrisa asquerosa.
El guardián entre el centeno
Página 76


Eso es lo que tienen las chicas. En cuanto hacen algo gracioso, aunque de aspecto no sean gran cosa y aunque sean un poco tontas, acabas enamorándote de ellas y entonces ya no sabes donde demonios estás. Las chicas. Dios Santo. Pueden volverte loco. De verdad.
El guardián entre el centeno
Página 97


Yo creo que nunca tengo nada que me importe mucho perder. Quizá por eso sea en parte cobarde. Aunque no es excusa. No lo es. No se debe ser cobarde en absoluto; si tienes que atizar a alguien un puñetazo en la mandíbula y te apetece hacerlo, debes hacerlo.
El guardián entre el centeno
Página 117


Esta caída a la que creo que te diriges es de un tipo muy especial, terrible. Al que cae no se le permita ni oír ni sentir que ha llegado al fondo. Sólo sigue cayendo y cayendo. Es el tipo de caída destinada a los hombres que en algún momento de su vida buscaron en su entorno algo que este no podía proporcionarles. O creyeron que su entorno no podía proporcionárselo. Así que dejaron de buscar. Abandonaron la búsqueda antes de iniciarla siquiera.
El guardián entre el centeno
Página 233
Como veis es fantástico. Me atrae mucho que de la sensación de estar leyendo un blog, y la sencillez con la que puedes meterte en circustancia como el que cambia de canal. La historia transcurre en me parece 3 ó 4 días. Lo dicho esta es mi recomendación. Espero que me hagáis caso y disfrutéis tanto o más que yo.

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